"Así como hay youtubers para todo, son numerosas las maneras de referirse a ellos, aun dentro de una misma categoría. El edutuber, por ejemplo, hace parte de de los cultubers, pero el profesor de filosofía también puede ser filotuber, filosotuber o –para los que consideramos (no sé si erróneamente) equivalentes e intercambiables los conceptos youtuber e influencer–    filinfluencer. Todo dependerá de cuán ‘existancialista’ sea la mirada que quiera aprender a través de las redes sociales. 
Pero también existen los youtubers que, además de caber en múltiples variedades de generadores de contenidos, incitan a la recreación de las categorías mismas. Tal es el caso de Paola Andrea Fernández quien se autodefine ‘docente millennial’ pero, en realidad, es una vanguardista de la educación 3.0 al ser la única maestra de filosofía de Colombia con canal de Youtube –creado en 2016– y cuentas en Instagram y TikTok, Diarios de una Sofía, en donde comparte contenido al mejor estilo pop mediante dibujos ‘mamarrachudos’ que analizan situaciones coyunturales –desde el conflicto Ucrania versus Rusia, hasta la bofetada de Will Smith a Chris Rock– a la luz de las corrientes filosóficas de todos los tiempos. 
Su revolución no termina en ser única. Su apariencia rompe los esquemas de la típica ‘profe’ de filosofía (la inconformista y bohemia heredera de la boina y la blusa de rayas bretonas de la generación beat), pues Paola es una rubia de labios rojos, cejas pobladas bien definidas y piercing en la nariz. De ahí que sea una especie de pionera entre los cultubers; ella tiene su propia etiqueta: cooltuber.
¿Cómo surgió la idea de crear Diarios de una Sofía?
Siempre he tratado de que mis clases sean interactivas; desde que comencé a ser dicente de alumnos de colegio (en 2015, a mis quince años), busqué alternativas como llevarles videos, películas, etc., pero se quedaban, igualmente, dormidos por la densidad de la narrativa. A pesar de ello, me quedé en lo que siempre he creído y he querido transmitir y es que la filosofía está en la vida cotidiana, más allá de los textos, más allá de la torre de marfil académica en la que la ponen porque, por eso los jóvenes están alejados de la filosofía. En busca de ello, hice muchos juegos y actividades en mis clases, pero finalmente, los alumnos terminaban aburriéndose porque ¡son muchachos! Entonces dije: ‘buscaré videos en Youtube’, pero lo que encontré era súper aburrido, denso y aún más tedioso de lo que estaba intentando no hacer en clase. Y dije: ‘más bien, ¿por qué no hago, yo, mi material?’.
Maneja dos formatos, uno es el video y el otro es una especie de cómic. ¿Ha sido su clave para abarcar más público?
Sí, ya que los videos son para Youtube y Tiktok; los dibujos son para Instagram y los uso como material pedagógico también en mis clases, porque si los niños son capaces de entender la imagen, finalmente están entendiendo la teoría. También, trato de reflejar mediante ellos situaciones, emociones y los sentimientos que pueden experimentar, sobre todo los jóvenes; pero mis posts aplican para cualquier persona en general.
¿Cómo está compuesta su comunidad virtual?  
En Instagram, @diariosdeunasofia tiene una población de entre quince y treinta años (compuesta por internautas que me encuentran en redes y buscadores, alumnos y exalumnos). Es mi población general, más que mi target porque mi intención es llegarle a todo el público y, en especial, a esas personas que quieren aprender filosofía y entenderla de una manera más sencilla y práctica. Hace poco revisé las estadísticas y encontré que el setenta por ciento son hombres lo cual me parece extraño porque comparto mucho contenido feminista. En Youtube, la población es un poco más madura pues quienes consumimos esta red social, somos entre los veinticinco y los cuarenta años, ya que los chicos consumen más Tiktok y no se acomodan al video con formato superior a diez minutos de duración. Se dispersan.
¿Cómo ha sido su impacto al abordar el feminismo desde la filosofía?
Si bien el feminismo es un movimiento que tiene unos ámbitos éticos, políticos, sociales y activistas, siento que se ha desligado un poco de la teoría y (como lo busco) se ha llevado a la práctica y no solo por nosotras. Pensar que por ser mujer filósofa, debo hablar de feminismo, no necesariamente tiene que ser así; sin embargo, sí considero que una mujer filósofa tiene cierto compromiso pero más desde su rol como mujer de educar sobre qué significa ser mujer, qué roles se pueden asumir desde allí. La filosofía, hegemónicamente, ha sido masculina pero poco a poco, nosotras hemos surgido en este campo. Por ejemplo, yo me gradué con otras cinco mujeres y en mi semestre fuimos más mujeres que hombres. Poco a poco, las mujeres hemos ingresado en estos campos que eran, arquetípicamente masculinos. 
¿Este aporte de la mujer a la filosofía fue importante a partir de Simone de Beauvoir?
Si bien ella fue de las más importantes de la filosofía contemporánea, Hannah Arendt no se queda atrás. Simone de Beauvoir le dio paso al feminismo de tercera ola, activista y de interacción política, contestatario y que brotaba desde la rabia a veces, pero que era necesario en un momento en que se buscaban el sufragio y la independencia económica y laboral. Hannah Arendt, por otro lado, no hablaba desde su condición femenina, sino desde su profesión como politóloga, posicionando a la mujer en otro ámbito eminentemente masculino: la política; tanto es así que hoy en día, lo que pasa con Francia Márquez nos muestra los problemas que mantenemos en el país, como el racismo y la misoginia, donde una mujer vicepresidenta afro es blanco de muchos; siento que de haber sido un hombre afro, no hubiese sido tal la problematización desatada.
¿Por qué, en Colombia, los filotubers son tan escasos?
He tenido mucho diálogo con filósofos de las redes sobre todo, mexicanos, argentinos y españoles. Aquí en Colombia, conozco de psicología (hay un bumangués, creo, que hace contenido de psicología) pero de filosofía, nadie. Con otras mujeres filosotubers con quienes establecí contacto fueron Alba Lafarga que es española y Michelle Nadine quien es venezolana radicada en México; con ellas nos dimos cuenta de que en redes sociales nos menospreciaban o pensaban que nuestro trabajo no valía la pena porque ser mujeres y peor: ¡porque nos arreglamos! Michelle Nadine, por ejemplo es una rubia muy bella y joven y comenzó creando videos para Tiktok, por ende, su contenido era muy sencillo. Últimamente, les ha dado un toque más popular y ha abordado a diferentes filósofos y autores, pero los comentarios que le dejan quienes visualizan sus videos son sobre su belleza física y no la intelectual que está intentando compartir. Es complicado, porque no solo es abrirse campos en la filosofía sino además en las redes sociales; hay que romper estereotipos como el de pensar que cierto aspecto físico o modo de hablar puede determinar lo que compartes o hasta tu capacidad intelectual.
Y en la ‘primera dimensión’ ¿cómo ha sido su experiencia como ‘docente millennial’?
Cuando llegué a dar mi primera clase, me pusieron de directora de un once; suena muy hippie, pero a pesar de la dificultad de guiar a jóvenes de edades tan difíciles, siempre los eduqué desde el amor. Todo es más sencillo si uno refleja amor en su modelo educativo, pues el amor sienta más respeto, que el temor. Ningún estudiante me ha pasado por encima precisamente porque soy su lugar seguro, soy cercana a ellos al interesarme en aprender sus lenguajes; trato de estar al día de lo que ellos consumen, veo las series que ellos ven (así no me gusten) para saber qué mundo habitan, qué idioma hablan, etc. Poco a poco ya no están los profesores próximos a pensionarse, sino que mis compañeros son de edades que oscilan entre los treinta y cinco y los cincuenta años, por ello, la percepción ha cambiado pero hay padres que, al haber sido educados bajo otros estándares, siguen confiando más en el docente mayor, de gafas y barba y no tanto, de piercing.
¿Por qué la mayoría de filotubers de habla hispana son de Argentina, México y España? 
Creo que en Argentina hay más filósofos que divulgan en redes por la devaluación del peso argentino; al entrar ellos en dolarización tras establecer al dólar como moneda nacional, su economía está complicada y, al no encontrar un campo laboral favorable (es mi hipótesis basada en percepciones), empezaron a darse cuenta de que por medo de las redes pueden acceder a dólares que son mejores para su contexto. Asimismo, históricamente, Argentina se ha autorreconocido como un país más culto; allí se cultivan más las artes, la literatura y la filosofía, mientras que en Colombia somos un país más dado a la acción, a las carrera volcadas al hacer: las ingenierías, la medicina o a las carreras no formales (como el narcotráfico), que buscan retribución económica más allá de una retribución intelectual. Ahora bien, México y España han tenido gran formación humanista. En España, por ejemplo, nació el movimiento CultTube, que reúne a cultubers como la arquitecta ‘Ter’ (Esther, quien fusiona la ciencia y la cultura pop) el músico Jaime Altozano, el artista Antonio García Villarán, etc. Y en México hay mayor apoyo a la cultura más alternativa, independiente o a las artes liberales; a preservar sus tradiciones y nosotros no lo vemos así. Para nosotros la cultura es el espectáculo, la fiesta y el carnaval como algo ‘chévere’ y no tan solemne ni de cultivo intelectual, sino como un ejercicio exótico para los turistas.
¿Por qué se les suele vincular, a los filósofos, con los psicólogos? 
La filosofía es la madre de todas las humanidades y ciencias. La pegunta por el ‘qué’ es la base de todo, pero la psicología es el estudio de la psique para entender qué somos, cuál es nuestro propósito en el mundo. Preguntas existenciales que son propias de la filosofía. Queremos resolver nuestra acción en el mundo, pero también entender qué somos en ese mundo tan convulso, cuáles son las dinámicas que podemos tener para interactuar con el mercado, la mirada de los otros sobre nosotros y son preguntas abordadas desde la filosofía contemporánea como la hermenéutica, la filosofía de la mente, la fenomenología, etc.
Se cree que usted se llama Sofía.
Mi arroba es Diarios de una Sofía porque la palabra ‘filosofía’ se descompone en ‘filo’ (amor), y ‘sofía’ (sabiduría). Es amor a la sabiduría y tiene una connotación muy fuerte pues cuando uno ama quiere estar vinculado siempre a aquello que ama –es como la búsqueda del conocimiento. Y un diario es algo muy íntimo. Al ser de ‘una Sofía’, es algo muy personal de alguien quien ama la filosofía, como yo, Paola.
DESTACADO: “La filosofía pop analiza la coyuntura popular. Uno de sus representantes es el surcoreano es Byung-Chul Han, quien habla de las redes sociales, la sociedad del cansancio y de cómo nos autoimponemos dentro del régimen de la productividad”.
RECUADRO: Los filósofos ‘más cool’
Para una docente de filosofía y filotuber como Paola Andrea Fernández, elegir un filósofo imprescindible, “es como cuando a uno le piden la canción favorita y se le vienen a la mente todas”, sin embargo, no duda en señalar a Heidegger como un existencialista, hermeneuta y fenomenólogo clave en su carrera, al hablar “de cómo enfrentamos al mundo desde nuestras emociones; es la base teórica de la psicología humanista”, asegura la caleña.
“Albert Camus –añade– me demostró que la gente debiera leer primero, más filosofía que superación personal, más filosofía como la de Zeneca y no tanto Walter Rizo”. De ahí la importancia que tiene conocer a los filósofos más importantes que han forjado el pensamiento crítico a lo largo de 2.500 años
Ello será posible a partir del próximo diecinueve de abril, cuando llegará el primer tomo de la colección Descubrir la Filosofía. Un encuentro con los grandes pensadores de la historia que circulará este y todos los martes con EL TIEMPO, con una oferta de lanzamiento del primer libro –dedicado a Platón– por solo 6.900 pesos; a partir del segundo libro (que llegará el tres de mayo y abordará el pensamiento de Nietzsche), el precio de cada uno será 26.900 pesos. 
Los interesados en adquirir la colección completa a un precio de 589.000 pesos para suscriptores y de 787.000 pesos para no suscriptores podrán hacerlo a través de  tienda.eltiempo.com/filosofia o llamando en Bogotá al 4 26 6000, opción 3, y en la línea nacional gratuita 01 8000 110 990."