CÓNDORES NO ENTIERRAN TODOS LOS DÍAS
Una novela simbólica de los contrastes y heridas de Colombia a lo largo de su historia.
La reciente escalada de violencia en distintas zonas del país constituye un llamado a mirar atrás y entender las dinámicas políticas, sociales y culturales detrás de este fenómeno, y la narrativa de Gustavo Álvarez Gardeazábal es un gran testimonio de ello, con una novela que atrapa al lector desde sus primeras páginas y que termina sin dejar a nadie indiferente.
Con su característico tono directo, descriptivo y realista, Gustavo Álvarez Gardeazábal retrata la era de la Violencia de los años cincuenta, cuyo protagonista se ha convertido en uno de los personajes obligados de la literatura y la cinematografía latinoamericanas. Tras recorrer sus páginas, la impactante conclusión que deja este ejercicio literario de memoria y visión de país es que, encerrada entre dos mares, la Patria es un paisaje oscuro de cruces por donde se mire, de allí que la historia de Cóndores sea un legado inmortal para las letras colombianas